Malaleche 4 - Riddim 3

Viernes 22 hs, sexta presentación de Malaleche en la Zona 3 frente a Riddim, equipo que marcha último en esta fase regular pero que cuenta con buenos jugadores. Sabíamos que no iba a ser un partido fácil y así fue. Pero eso es algo que va a quedar en el olvido porque otra vez Malaleche ganó un encuentro impresionante. Estuvo tres veces abajo en el marcador y lo dio vuelta con mucha actitud, sangre y corazón. El match era clave si queríamos tener chances de entrar a la Zona Campeonato. Una derrota o, inclusive, un empate, nos hubiesen complicado muchísimo de cara a la recta final. Fue un triunfo increíble, un segundo tiempo cambiante, palo y palo, de ida y vuelta, emocionante por donde se lo mire. Por suerte, el festejo fue para nosotros.
Directamente en el partido, hubo algunos cambios en el equipo. Ante la ausencia de Diego, el Killy jugó como líbero. Belo pasó del medio a la defensa y, esta vez, Garo y Guido actuaron desde el arranque. En consecuencia, Malaleche alineó a Nacho; Belo, Killy, Mati; Mario, Pablo, Guido; Garo. Afuera estaban Rafa, Lisandro y el Polaco. El inicio mostró un encuentro cerrado, con ambos equipos muy ordenados y sin sacarse grandes ventajas. El lechero quería sorprender por los costados pero le costaba mucho llegar con peligro al arco rival. Un error del Killy en el fondo derivó en un tiro libre que pudo haber significado el primer gol del partido a favor de Riddim. Después de una serie de rebotes, el balón pegó en el travesaño. Nosotros tuvimos una muy buena ocasión de convertir por intermedio de Garo, pero su tacazo se fue desviado. El mal momento del partido llegó luego de un tiro de esquina a nuestro favor. Riddim inició el contraataque por la punta izquierda - la pelota se había ido totalmente de los límites del campo de juego - la pelota fue al medio, el Killy, pensando que Rodolfo Roquero, el árbitro, había cobrado lateral a nuestro favor, dejó pasar el esférico, que le cayó al jugador rival y anotó el 1 a 0, ante la salida de Nacho. Baldazo de agua fría. Así terminó la primera etapa.
En el complemento iba a empezar otro partido. Encontramos la igualdad por intermedio de Mati, quien picó por la derecha y, de emboquillada, puso las cosas 1 a 1. Pero enseguida Riddim encontró otro gol y a remar otra vez. La pelota le quedó a Mario en el área y definió de derecha para poner el 2 a 2. No hubo mucho tiempo de ir a buscar la victoria porque enseguida el delantero contrario clavó un terrible derechazo que dio en el palo izquierdo de Nacho y se metió adentro. Parecía muy díficil volver a empatar y mucho menos ganar. Pero el Rafa aprovechó una pelota áerea y, de cabeza, colocó el 3 a 3. Desde estas líneas les pedimos disculpas a la gente de Riddim por el festejo desmedido de Rafa. El partido, si bien había tomado un tono un poco caliente por las circunstancias que se estaban viviendo, jamás fue con mala intención. Faltaba poco para el final, Guido entró al área, pateó, la pelota pegó en el travesaño, el rebote le quedó nuevamente al 11 de Malaleche quien, de mediavuelta, dispara pifiado de zurda, cuando tenía de frente a Mario. El balón sale del área y le queda al Polaco, quien con un remate cruzado puso el agónico 4 a 3 final.
Partido vibrante, electrizante y con final feliz. El lechero, con este triunfo, quedó muy bien parado pero todavía falta el encuentro frente a Siberia, última fecha de la Zona. La cita es el viernes a las 23 hs y habrá que ganar para asegurar el ingreso a la Zona Campeonato. VAMOS MALALECHE!!


Ignacio Bottoni (5): No tuvo responsabilidad en los goles. En el primer tiempo sufrió poco y en el segundo su participación fue más importante, tapando algunos mano a mano.

Matías Beloqui (5): Esta vez jugó como defensor por la derecha. Al subir constantemente, dejó muchos huecos atrás. En la segunda etapa actuó como volante por derecha y terminó redondeando un partido aceptable.

Cristian Arbiza (5): Jugó en una posición totalmente nueva para él, como la de último hombre. Tuvo una floja primera parte, donde perdió pelotas abajo y fue uno de los principales responsables del primer gol rival. Pero en el complemento levantó muchísimo su nivel, sacó todo de arriba y de abajo y habló y ordenó permanentemente a sus compañeros.

Matías Arguelles (6): En el primer tiempo, al subir Belo, se tuvo que cerrar mucho al medio y dejó un espacio muy grande por su sector. En el segundo, el equipo se paró de otra manera, Mati fue importante en defensa y, además, anotó un gol.

Mario Ciallella (7): La figura de Malaleche y del partido porque intentó jugar siempre. Complicó con su habilidad y marcó un gol en este partido infartante. Fue un juego difícil para elegir al mejor pero creo que Mario, por lo hecho a lo largo de los 50 minutos - no sólo en el segundo tiempo- fue el más destacado del encuentro.

Pablo Burgos (5): Es claro que no se siente del todo cómodo jugando como volante central. Si bien el juego de Malaleche nace en sus pies, no termina siendo influyente en esta posición por falta de ubicación y porque juega muy lejos del arco. Además, no está fino con los pases como nos suele acostumbrar.

Guido Noé (5): Regular partido del quemero. Flojo en la primera parte, mejorando considerablemente en la segunda. Definio estrellando su tiro en el travesaño en la jugada que deribo en el gol del polaco, cuando lo tenia solo a Mario. Para destacar, sus ganas y su entrega.

Juan Pablo Garófalo (5): Tuvo algunas chances de marcar en el primer tiempo. Especialmente, en la jugada que tiró un taco. Corrió todas pero no pudo anotar.

Lisandro Vázquez Giménez (5): Ingresó en el primer tiempo por Guido para ordenar la defensa. El rato que jugó no lo hizo mal, no pasó grandes sobresaltos.

Rafael Milillo (6): Un gol que sirvió mucho en lo anímico. El eterno goleador dijo presente y fue importante en el desarrollo del partido.

Damián Aquino (6): Antes de su conquista, había probado desde afuera y la pelota pasó cerca. Después, tuvo su revancha y le dio una victoria estupenda a Malaleche. Su único error fue en la jugada que derivó en el tercer gol de Riddim, en la que perdió la pelota en el medio cuando quiso gambetear al adversario. Pero hizo un gran partido y revivió a Malaleche con ese cuarto tanto.